Monday 24 June 2013

¡Macarons!

¿Saben ustedes cómo meter 100 aragoneses en un Seiscientos? Diciéndoles que no caben... Pues así más o menos empezó mi historia con los Macarons. Me dijeron que eran muy difíciles de hacer, así que ¡allá fuimos yo y mi aragonesa (y a mucha honra) cabezonería! ¡Con lo que me gustan a mí las camisas de once varas, oiga!

Para los que no sepan lo que son, se trata de unos pastelillos delicadísimos formados por dos galletitas de merengue con almendra y rellenos de cosas varias: Mermelada, crema de queso, chocolate... Lo más llamativo es que las galletas suelen ser de colores y son los pasteles más bonitos que he visto en mi vida. Como definición, me encanta la foto que hay en este blog. Pero para ver lo bonitos que son, miren este.

Por supuesto, lo primero que hice fue acudir a mi fiel amigo Google y me leí casi todo lo que encontré. Me di cuenta de varias cosas: 1) Algunos blogueros se copian mucho (interesante pero irrelevante); 2) Hay una cosa que se llama azúcar a punto de bola y algunas recetas incluyen un paso en el cual hay que conseguirlo. Puesto que no sé lo que es, la mitad de las recetas quedaron descartadas (no hay mal que por bien no venga); 3) Las recetas infalibles no lo son tanto a juzgar por los comentarios

No me voy a molestar en escribir la receta porque la tienen ustedes muy bien explicada en Bakemanía. Yo la he hecho dos veces por lo tanto NO SOY ni mucho menos una EXPERTA. Pero me han quedado bastante bien a la segunda y eso es motivo de celebración. Así que les voy a explicar lo que me salió mal y lo que me salió bien por si les sirve de algo.

La primera vez los hice rosas porque tenía una botellita de colorante a mano. Y como quedaban tan monos, decidí rellenarlos de mermelada de fresa. ¡Error! Bueno, error para mí que no me gustan las cosas tan dulces. Me parece que es mejor equilibrar el dulzor del macaron con un relleno amargo (chocolate negro). El segundo error que cometí es que me quedaron huecos y la tapa con un piquito. Así que la vez siguiente hice dos cosas diferentes: Mezclé más las almendras con el merengue (para que la masa quedase más líquida) y además los dejé secar una hora antes de meterlos al horno (en la receta dice 30 minutos).

Esta segunde vez me quedaron mucho mejor, aunque con mi pasión por el chocolate, creo que me he pasado un poco con el relleno. De todas formas, ahí les dejo las fotos que yo me voy a casa de una amiga a hacer una cata ¡A ver qué me dice!

 
 


 


 





1 comment:

  1. Yo soy la afortunada que hizo la cata de macarons y he de decir que estaban riquisimos!!!ahora deseando probar mas sabores :)

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